Las articulaciones son partes del cuerpo donde los huesos se unen. Las articulaciones están formadas por las carillas articulares de los huesos que, junto con los músculos, tendones y ligamentos, permiten que los huesos del esqueleto se muevan.
El dolor en las articulaciones puede manifestarse como incomodidad, dolor o inflamación que surge de cualquier parte de una articulación. Sin embargo, por lo general, el dolor en las articulaciones está relacionado con artritis o artralgia, que es inflamación o dolor en el interior de la articulación y que se trata de una condición frecuente.
El dolor en las articulaciones habitualmente limita el movimiento y puede ser leve y causar molestias solo después de ciertas actividades, o puede ser intenso y hacer que, hasta los movimientos más habituales, particularmente levantar peso, sean extremadamente dolorosos. Además, puede ser agudo o convertirse en un dolor crónico.
El dolor articular puede ser consecuencia de una lesión local como ocurre en quienes realizan algún deporte (codo de tenista, por ejemplo) o tratarse de una condición que afecta articulaciones de más de una región del cuerpo. En este último caso la osteoartritis comúnmente conocida como artrosis, es la causa de artritis crónica más frecuente.
Otras causas de dolor en las articulaciones son las infecciones, la acumulación de cristales de ácido úrico o la inflamación por enfermedades autoinmunes como la artritis reumatoidea.
Paracetamol es un analgésico que alivia los dolores articulares y reumáticos. Está especialmente indicado además si no se pueden utilizar antiinflamatorios. Es bien tolerado y seguro cuando se toma en la forma indicada.
- Evitar mover la articulación de un modo que cause dolor o lo empeore.
- Colocar frío (hielo en un paño) sobre la articulación afectada durante unos 15 o 20 minutos, algunas veces en el día.
- El agua tibia puede relajar los músculos y aumentar la circulación.
El dolor articular puede ser consecuencia de una lesión local como ocurre en quienes realizan algún deporte (codo de tenista, por ejemplo) o tratarse de una condición que afecta articulaciones de más de una región del cuerpo. En este último caso la osteoartritis comúnmente conocida como artrosis, es la causa de artritis crónica más frecuente.
Otras causas de dolor en las articulaciones son las infecciones, la acumulación de cristales de ácido úrico o la inflamación por enfermedades autoinmunes como la artritis reumatoidea.
Paracetamol es un analgésico que alivia los dolores articulares y reumáticos. Está especialmente indicado además si no se pueden utilizar antiinflamatorios. Es bien tolerado y seguro cuando se toma en la forma indicada.
- Evitar mover la articulación de un modo que cause dolor o lo empeore.
- Colocar frío (hielo en un paño) sobre la articulación afectada durante unos 15 o 20 minutos, algunas veces en el día.
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